Querida Sonia:

 

Independientemente de si fue cierto o no lo de la mujer aquella que se sacrificó por ti, lo importante es que sepas que de ti depende enteramente el que te deshagas de ese o de cualquier otro karma. Si lo quieres ver de otra manera, simplemente pregúntate: ¿en este preciso momento de mi vida, con mis condiciones físicas, mentales y emotivas actuales, me conviene deshacerme de cualquier karma que me lleva al sacrificio, o, por el contrario, lo que verdaderamente me puede empujar hacia la luz en la Tierra es seguir como hasta ahora he ido, pensando que lo que en realidad está pasando es que me estoy sacrificando por los demás, cuando, como ya me lo dijo Enrique en otro correo, lo que en verdad estoy intentando es llamar la atención sobre mi persona, habida cuenta que en otras vidas siempre se me brindó atención sin que yo lo agradeciera, y ahora debo aprender lo que se siente que las personas que más me significaron me la hayan escamoteado?

 

Asimismo, la verdad que yo conozco es que estos tiempos ya no son de sacrificio, y que cualquiera de nosotros nos podemos perdonar nuestras faltas desde el fondo de nuestro corazón y seguir adelante de la mejor manera posible. Todo es mucho más fácil de esta manera, además de que la nueva era que ya está empezando a llegar así lo favorece.

 

Si quisieras dejar atrás los karmas, pídele al Espíritu que te haga llegar el procedimiento, pero pídelo sólo hasta que estés completamente convencida de que así debes hacerlo. De otra manera ni lo intentes, porque acuérdate que se te pueden hacer realidad material ciertas cosas sin que estés debidamente preparada para enfrentarlas.

 

Amén.

 

Enrique Rojas.