EL VIAJE A IXTLAN SENDA DEL GUERRERO

De: Antonio (Mensaje original)

Enviado: 19/08/2003 13:29

Querido Enrique:

En uno de tus anteriores mensajes nos dijiste que habías leído el libro de Castaneda "El arte de ensoñar" en el cual se describen los diferentes pasos que se siguen en su linaje para la disciplina tolteca del ensueño. Antes de leer "Nerea" y ponerme en contacto contigo, constituía este libro mi principal referencia para practicar el ensueño. Ahora que estoy desapegándome del intento de Carlos de forma definitiva he perdido la orientación fundamental que este libro me daba.

Te contaré mis avances como ensoñador. He tenido etapas de sueños lúcidos con una frecuencia de 5 por mes estas fases se correspondían con periodos de mi vida en los que había paz interior-. Asimismo, en un par de ocasiones he sido consciente del tránsito del sueño a la vigilia y viceversa. También logré en más de una ocasión cambiar de un sueño lúcido a otro con mi voluntad. Estos avances ocurrieron a principios del 2003, poco antes de conocerte y también poco antes de finalizar mi relación con mi anterior pareja. Después de la ruptura de esta relación, la cual me proporcionaba estabilidad en algunos aspectos de la vida, no he vuelto a tener sueños lúcido a excepción de una o dos ocasiones.

Creo que nunca he llegado al doble aunque mis sueños de la infancia eran tan lúcidos y volaba yo con tal potencia que quizá fue eso llegar al doble-, mas en alguna ocasión he intentado llegar al mismo y salir fuera de mi cuerpo y algún pequeño movimiento he conseguido.

Mi pregunta es la siguiente: ¿Podríais enseñarnos a los ensoñadores de esta comunidad a ensoñar siguiendo los pasos que se siguen en el linaje de don Jorge Elías? Para mi sería fantástico.

Un abrazo

Antonio

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De: <NOBR>

laliu_</NOBR>

Enviado: 19/08/2003 20:38

Hola Enrique, Antonio

Me uno a esta solicitud, creo que andamos a la deriva y si como

Enrique nos ha dicho no esposible que encontremos un Nagual que

nos guie nos puedes dar tu ese conocimiento que tanto anhelamos

aunque no podamos dar el salto pero que con esto seamos mejores

personas? y miremos un pco de lo que esta del otro lado y nos

inundemos de mas amor y sobriedada etc?

Un abrazo para los dos

Eduardo

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De: enrique

Enviado: 21/08/2003 1:21

Querido Antonio:

Para los guerreros del linaje de don Jorge, una de las cosas más importantes es conseguir el equilibrio de la personalidad del guerrero antes de emprender la instrucción especializada que conduce al ensueño o al acecho. Es así que cuando el guerrero ha logrado dejar atrás todas las experiencias que le dejaron algún mal sabor de boca, y cuando ya logró perdonarse todos sus errores y los de los demás, asumiéndolos como lecciones de la vida para permitirle llegar a la posición en la que se encuentra, y a las que intenta llegar, es entonces que la ensoñación resulta, efectivamente, un juego de niños.

Ustedes saben bien que las instrucciones recibidas por Carlos Castaneda y su mini clan son prácticamente las únicas detalladas que les han llegado para intentar el ensueño (hay otras que ustedes mismos han referido), pero no pierdan de vista que ese tipo de instrucciones se les dieron a Castaneda y su prole porque sus personalidades así lo requerían, lo cual no quiere decir necesariamente que les sirvan a ustedes. De hecho, muy poco de lo relativo a alcanzar las llamadas compuertas del ensueño hubiera sido necesario si "Carlitos" y sus brujas hubieran tenido otro tipo de personalidad. Nerea, por ejemplo, jamás de los jamases recibió ningún tipo de instrucción para ensoñar, y para ella eso de las compuertas simplemente es un cuento chino, habida cuenta que su intento es tan limpio que para ella simplemente no hay compuertas, todo está abierto, ¡directo hasta la fuente!

Lo que yo les recomiendo es que se quiten de instrucciones intelectuales sobre ciertos pasos muy específicos para ensoñar, y en cambio le echen todos los kilos a quedar en paz consigo mismos, bien sea recapitulando y o meditando, pero sobre todo perdonando y perdonándose por medio de la fuerza del amor. La diferencia que verán en sus sueños (dije sueños, no ensueños) cuando lo consigan será literalmente como de la Tierra a Alfa Centauri, pues representará el primer paso firme que los acercará al ensueño verdadero.

Conseguido esto, podremos hablar de ciertos procesos que favorecen el desarrollo en el ensueño como un modo del conocimiento, pero antes no es conveniente. Y no lo es, porque ya Antonio mismo puede dar fe de lo que sucede cuando se roza el ensueño de manera espontánea y el soñador dotado no se ha protegido debidamente, bien sea por desconocimiento o por decidia.

Enrique Rojas.