cuando ensoñamos vemos un mundo intentado, intentado a cada rato, le damos forma todo el tiempo, cuando alcanzamos cierta practica, podemos decidir que hacer, a donde ir, como manejarnos, pero seguimos guiandonos por las reglas del mundo ordinario, donde cada cosa tiene un espacio, donde cada cosa tiene forma, materia, nombre, donde el tiempo se mide con un reloj, donde la gente es gente, es ahi donde le pifiamos, en creer que el movimiento en el ensueño, es igual que en el intento ordinario, en creer que el espacio tiempo existe, ese es el error, el error es describir, explicar, dar forma,
De la pelicula la matrix que tanto se habló, ( a mi pueblo no llego aun la segunda) la secuencia que más me impactó fue la de la cuchara, cuando el niño le dice a neo que no intente doblar la cuchara, que eso es imposible, que lo que tiene que hacer es darse cuenta que la cuchara no existe. en el ensueño pasa eso, tratamos de doblar la cuchara, tratamos de vencer el espacio, tratamos de volar de un lugar a otro, no hay un lugar, no hay un espacio,somos nosotros en el infinito en la nada, las paredes no existen, y sin embargo he golpeado mi frente en ellas mas de una vez, reconozco si, que es bellicimo, experimentar, oler en los sueños, atravezar un muro y detenerse adentro un rato, sentir su textura, mientras se cruza de una punta a otra, sentir el viento en la cara mientras se vuela a gran velocidad, sentir el vertigo del vuelo, los colores, que bellos los colores de esos atardeceres en el paraiso del infinito, pero a fin de cuentas , siguen siendo descripciones, le seguimos dando nombre a las cosas, seguimos dando formas, seguimos intentando, seguimos buscando la manera de que las cosas sean conocidas, nos aferramos, en algun momento nos encontramos cara a cara con la negrura, con el oscuro total, y en vez de percibir, nos preocupamos por que no vimos nada. pues, es muy bonito ensoñar, seguro que si, pero la finalidad, no es llegar a un lugar, la finalidad, es aprender a percibir esa inmensidad, ese desconocido, eso que esta aqui en nosotros, y que no tiene forma, ni color, ni textura, ni se parece a nada que podamos haber conocido e imaginado, por que es justamente lo desconocido, ese lugar sin lugar, donde la nada repleta de todo nos espera, quiza, de apoco, de a poquito, nos vamos a poder despojar de nuestra necesidad de describir, y dar nombre y forma. quiza un dia tengamos el poder suficiente para darnos cuenta que las cucharas no existen.
serrano